Según la ministra del Medio Ambiente, a pesar de la crisis social, se mantiene la meta de aprobar todos los reglamentos de la REP y el aumento de presupuesto para la eliminación de las zonas de sacrificio, entre otros temas. Fuente: La Tercera, 4 de diciembre de 2019.
Tanto la COP25, que se cambió de Chile a España, como la crisis social en nuestro país, influirán de alguna forma en la agenda medioambiental que tenía el gobierno antes del estallido. De hecho, la situación actual de Chile en los dos últimos meses es un tema recurrente en los pasillos y eventos del Ifema de Madrid, recinto donde se realiza la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, a la cual fue invitado PULSO por Aguas Andinas.
Según la ministra del Medio Ambiente, Carolina Schmidt, “La crisis social y la crisis ambiental que enfrenta hoy el mundo, son las grandes crisis del siglo XXI, y no podemos enfrentar una sin hacernos cargo de la otra”. Además, indica que como ministerio se enfocarán en “propiciar nuevos y mejores planes y normas para avanzar en la eliminación de las zonas de sacrificio en el país, lo que se evidencia en un aumento de nuestro presupuesto para esta materia”.
La jefa de la cartera medioambiental chilena ha sido una de las protagonistas durante estos días en la capital española. De hecho, solo ayer, recibió la “antorcha climática” en la Zona Verde de la COP; dio una conferencia de prensa con el ministro de Ciencias, Alfredo Couve y el príncipe de Mónaco, Alberto II; y para coronar la jornada realizó la inauguración oficial del Pabellón de Chile en la Zona Azul del evento.
Con respecto a si continúa la hoja de ruta para aprobar los reglamentos de metas y valorización de los cuatro productos prioritarios que quedan de la Ley de Reciclaje (REP) antes de que termine este mandato, Schmidt responde: “Sabemos que la meta autoimpuesta es ambiciosa y desafiante, sin embargo, los equipos siguen trabajando para alcanzar ese objetivo y tenemos la convicción de que lo alcanzaremos”, dijo.
Schmidt también se refirió a la calidad del aire, recambio de calefactores y a la educación ambiental, la cual “será otro de nuestros focos principales”, indicó.
Desde el sector privado, Narcís Berberana, director de Aguas Andinas y director general de Agbar en Cataluña y Baleares, cree que, así como las anteriores COP pusieron la importancia del cambio climático sobre la mesa, la actual versión de este encuentro mundial, debería acelerar iniciativas concretas en Chile. “Hay que destacar proyectos específicos y compartirlos, porque esos son las que ayudan a actuar. No podemos perder el tiempo con grandes proyectos”, comentó el ejecutivo, luego de un foro organizado por el pabellón chileno sobre Economía Circular el día de ayer.
Por su parte, Hans Eben, presidente de Pacto Global Chile cree que claramente una COP se hubiese visibilizado más en nuestro país en otro contexto. “Por eso, desde el punto de vista empresarial tenemos que tomar esto como una oportunidad”, comenta. Agrega que después del estallido social, “las iniciativas sustentables se van a acelerar, porque hoy la calle está pidiendo incluir más actores. Además, las empresas y los directorios se están haciendo cada vez más las preguntas de cómo hacer una economía más inclusiva”.
Aumentar la ambición climática es el tema principal de la COP25. Los recientes estudios indican que a partir de 2020 y durante la próxima década el mundo debe reducir las emisiones 7,6% anual para limitar el aumento de temperatura en 1,5° Celsius. “Para cumplir este objetivo requerimos el esfuerzo de los gobiernos, pero también de las ciudades, empresas e inversionistas y la COP25 será una gran oportunidad para impulsar ambición”, comenta la ministra del Medio Ambiente.
Incluso, uno de los temas fundamentales a resolver en la COP25 es el artículo 6 del Acuerdo de París, que define el aporte de los privados dentro del mercado de carbono.
Intervención sorpresiva de pueblos originarios
Durante la inauguración oficial del Pabellón de Chile en la COP 25 sucedió algo que estaba fuera de programa. Un grupo de representantes de pueblos originarios interrumpieron la ceremonia y pidieron hablar antes de que todos se retiraran del recinto. Un representante de la Comunidad de Atacama pidió que “Chile se pusiera las pilas y que no todo fuera discurso. Sabemos que están comprometidos, pero necesitamos que ese compromiso se haga real”.