Los océanos, cambios políticos en América Latina y el avance de la crisis climática: los aspectos fundamentales para la COP27

COP27: Jóvenes chilenos convocan a autoridades a apoyar declaración de cambio climático
31 agosto, 2022
Inventario Nacional de la Calidad del Aire realiza el primer estudio detallado sobre Contaminación en Chile
30 septiembre, 2022

La Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP27) se llevará a cabo en noviembre de este año en Egipto. La crisis climática está cada vez más presente en la agenda de los gobiernos latinoamericanos, por los eventos extremos que vienen ocurriendo en Chile y otros países. Entre estos, un aspecto importante a considerar es la protección de los océanos. “El océano oxigena el planeta. La mitad del oxígeno que respiramos proviene del océano. Entonces, si bien tenemos un gran pulmón verde que es el Amazonas y los grandes bosques terrestres, no podemos desconocer que la otra mitad, del otro pulmón, es azul y está ahí en el océano”, expresó Catalina Velasco, bióloga marina y cofundadora de la Fundación Mar y Ciencia. Fuente: El Mostrador, 30 de agosto de 2022.


Los océanos aportan casi el 50% del oxígeno que necesita la humanidad, sin embargo, reciben toneladas de residuos humanos todos los años, es más, en enero de este año el oceanógrafo Osvaldo Ulloa fue el primer chileno en descender a la Fosa de Atacama, a 8 mil metros de profundidad, y lo que encontró fue una bolsa de plástico. Frente a la urgencia climática que incumbe la protección tanto de los territorios como del mar, los miembros de las Naciones Unidas completaron este viernes dos semanas de negociaciones que concluyeron sin un tratado de protección de la biodiversidad en altamar, acuerdo que podría haber atendido los desafíos ambientales y económicos necesarios para la actualidad y el futuro de los océanos.

“No podemos hablar de crisis climática y ecológica desconociendo lo que ocurre en el océano. También es víctima de la crisis climática y ecológica, pero por otro lado también nos ayuda a contrarrestar la misma”, comentó Catalina Velasco, bióloga marina y cofundadora de la Fundación Mar y Ciencia.

“Los humanos somos seres marinos, aunque queramos o no, aunque no vivamos bajo el agua, porque en realidad estamos vivos gracias al océano. El océano regula el tiempo y el clima. Entonces, que tengamos una tierra con condiciones habitables es gracias a eso”, agregó.

En la tierra, al estar rodeada de agua, los océanos son una parte que une a todos los continentes, y frente a la urgencia climática que se ha generado, desde 2019, la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP) se promocionó como “COP Azul”, con el objetivo de ser un puente entre las cuestiones oceánicas y las negociaciones de la ONU sobre el cambio climático. Surge entonces la duda sobre cuál va a ser el lugar que van a tener las discusiones sobre los océanos en la COP27, que se desarrollará en Egipto la segunda semana de noviembre de este año.

“El océano oxigena el planeta. La mitad del oxígeno que respiramos proviene del océano. Entonces, si bien tenemos un gran pulmón verde que es el Amazonas y los grandes bosques terrestres, no podemos desconocer que la otra mitad, del otro pulmón, es azul y está ahí en el océano. Gracias a todos los organismos que hacen fotosíntesis en el océano, como el fitoplancton, los manglares, los pastos marinos. Además, el océano es una verdadera arma contra la crisis climática. Gran parte del exceso de calor y de CO2 que liberamos a la atmósfera es reabsorbida en el océano. Es almacenado en estos reservorios de carbono azul que son nuestros reservorios de carbono, que se almacenan en las grandes profundidades del océano o en las zonas de los bosques submarinos, etcétera. Entonces, el océano, al estar siempre absorbiendo estos excesos de dióxido de carbono y de calor, nos ayuda a contrarrestar los efectos devastadores de la crisis climática”, explicó Catalina Velasco.

¿Qué papel tendrá el océano en la COP27?

El asesor de políticas públicas de Mission Blue y experto en políticas oceánicas, Maximiliano Bello, expresó que la COP27 es una instancia que debe incluir las discusiones sobre océanos dentro de los acuerdos, porque finalmente cubren el 70% de la superficie del planeta.

“Es loco pensar que en realidad en 25 años el océano nunca había sido parte de la COP y es una parte faltante porque no puede uno hacer la matemática si le falta la mayor parte de los números, entonces, eso es muy clave. Pero además la COP siempre trae la posibilidad de hacer acuerdos o anuncios muy importantes, como lo que hicimos con Panamá, Ecuador, Costa Rica y Colombia respecto de la creación de un corredor. Esperamos ver más de eso, cuestiones concretas, no solamente seguir la negociación y seguir, digamos, estas discusiones, sino que ver cosas concretas de avance”, sostuvo Bello.

Si bien hace solo algunos meses, en la Cumbre de las Américas, el Presidente Gabriel Boric anunció la creación de corredores marinos protegidos desde la Patagonia hasta Alaska, Bello comentó que, más allá de lo anunciado, es necesario también analizar los avances y los resultados.

“Creo que tenemos que empezar a mostrar los resultados, o al menos los avances de qué es lo que se está pensando, cómo vamos haciendo análisis de lo que falta, cómo vamos haciendo análisis de lo que necesitamos en protección”, señaló.

La COP27 llega en un año donde se han podido evidenciar las consecuencias de la crisis climática en distintos países del mundo, adicionalmente, hay otros factores que también también afectan el medio ambiente, por ejemplo, la guerra entre Rusia y Ucrania. América Latina no está exenta de estos cambios. En Chile asumió un Gobierno que quiere ser ecológico; en Colombia, la vicepresidenta electa, Francia Márquez, es activista medioambiental. Pero, por otro lado, el Gobierno de Jair Bolsonaro en Brasil ha puesto ciertas trabas para llegar a acuerdos de disminución de las emisiones de carbono, siendo uno de los países que más emite CO2 en el mundo.

“Con Brasil ha sido constantemente difícil, cierto, llegar a los acuerdos, más también en llegar a un acuerdo sobre la importancia del océano. La región es sin duda alguna hoy día líder en la conservación marina, pero tenemos estas situaciones donde hay algunos países que no, no lo están entendiendo y no lo ven así. Tenemos también, por ejemplo, Perú, que no ha avanzado nada en el área protegida y tenemos también algunos otros, ciertos problemas con algunos de los otros países en la región”, comentó Bello.

En ese sentido, Chile tiene casi un 43% del total del territorio de Áreas Marinas Protegidas, una cifra alta en comparación con otros países, sin embargo, esta medida no ha estado exenta de críticas, especialmente relacionadas con la protección de las zonas costeras.

Llegar a la carbono neutralidad para 2030

“Si bien Chile está siendo un ejemplo a nivel mundial, aún nos falta tener planes de implementación de esta protección, hacer una protección realmente efectiva, que haya más fiscalización, que haya planes de implementación y que no quede todo en las áreas marinas de papel en el fondo. Entonces, cuando llega algo como la COP27, uno espera que se tomen acuerdos concretos que nos lleven a esta protección y, por otro lado, a la carbono neutralidad, que es uno de los acuerdos más importantes que tenemos que tomar y trabajar ahora para que se logre de aquí al 2030, que es casi mañana”, explicó Catalina Velasco.

Respecto a esto último, Estefanía González, coordinadora de campañas de Greenpeace, mencionó que la COP27 es “importante no solo para Chile, sino que para el mundo, porque literalmente se nos acabó el tiempo con los compromisos que los países han hecho a través de sus contribuciones”.

“La verdad es que no estamos cumpliendo con la meta de poder mantener la temperatura del planeta en los 1,5 grados de aumento, y eso tiene consecuencias para el mundo entero y en particular para Chile, que es uno de los países más afectados por el cambio climático. Por lo tanto, tenemos que estar muy atentos a cuáles son los compromisos que el mundo está tomando para poder detener el calentamiento global”, agregó.

Finalmente, la coordinadora de campañas de Greenpeace señaló que los procesos democráticos y la participación de la sociedad civil en la definición de la política pública constituyen algo “fundamental para buscar soluciones que den respuesta pertinente a la crisis climática”.